La Alharía está ubicada en la margen de Europa, pero ha atraído en las últimas décadas a muchas personas de todo el mundo. Por un lado, están los amigos que regresan siempre, buscando intercambiar, inspirarse y ampliar sus horizontes, o disfrutando de la vida con la naturaleza y la tranquilidad. Por el otro lado la Alharía fue la primera finca de la región que invitaba en cambio de alojamiento y alimentación a apoyar en la agricultura, el manejo del bosque y la construcción de la vivienda. Así llegaban y siempre llegan nuevos visitantes a la finca. Desde hace décadas los amigos y los visitantes contribuyen al desarrollo de la Alharía y ayudan a dejarla crecer y florecer. Actualmente existen dos posibilidades de colaborar en la Alharía.